Ser masajista gay


El masaje gay es uno de los servicios que más curiosidad despierta. Puedo afirmarlo dado que mis clientes me comentan su experiencia en estos términos. Muchos encuentran este blog por casualidad, empiezan a leer y acaban llamando cuando creen que es el mejor momento para probar el masaje que ofrezco.

Esta curiosidad tiene muchos aspectos positivos.

A nivel individual o personal el masaje que propongo despierta interés, curiosidad. Está envuelto en esa neblina del misterio. ¿Qué hay de prohibido, de peligroso, de pecaminoso o de perverso en el masaje erótico? ¿No es un eufemismo para "tapar" un servicio simplemente sexual?.

En cambio a nivel social "ser masajista" es algo con un reconocimiento pobre. No es equiparable a ser "broker", ingeniero genético o incluso "hacker". No caemos hasta el extremo del menosprecio que la sociedad siente por los políticos, la familia real o los especuladores desalmados. Al parecer el masajista erótico despierta morbo aunque está exento del glamour del riesgo y del exceso.

El masaje es una profesión vista como antigua, convencional, estancada y exenta de novedades. Creemos que sabemos en qué consiste porque no le atribuimos una evolución. Quizá todo el mundo tiene algún o alguna masajista en su círculo de amistades o incluso en la familia.

Curiosamente a nivel individual mi trabajo despierta un interés más intenso. Una vez me quedo a solas con estas personas que delante de otros opinan que el masaje es algo banal, se destapan haciendo preguntas que indagan muy hondo en la naturaleza de mi servicio. No son solo anécdotas lo que desean escuchar. Desean entender los engranajes de la sensualidad y el erotismo.

Cómo se transmite la sensualidad en un masaje. Cuáles son los resortes del erotismo, de la excitación y cómo se lleva a un cliente al orgasmo. Nadie imagina cuáles son los movimientos de manos o las órdenes que un masajista erótico puede darle a su receptor del masaje para lograr este estado de excitación sexual.

Masaje y conocimiento

Lo que pocos adivinan es que no se trata de usar mecánicamente ciertas técnicas. Hay algo más que es la energía personal que uno tiene, la actitud que un masajista sabe desarrollar, la comunicación de piel y de sentidos que el masajista debe manejar.

Es parecido a saber encauzar el agua que brota de un modo salvaje y destructivo. Canalizando el liquido atropellado, el agua cobra poder, fuerza, empuje y se transforma en energía.

El masaje sin control ni liderazgo por parte del masajista suele tener un mal final —ya ni siquiera un final feliz. El masajista debe saber usar las riendas de los deseos, los caprichos y la excitación desbordada del cliente. A veces el cliente desea alcanzar el orgasmo antes de tiempo, tocar de forma procaz las partes nobles del masajista o cualquier otra cosa que le viene a la voluntad de un modo violento y descontrolado.

El futuro del masaje

El futuro del masaje lo construimos nosotros los masajistas, sesión a sesión. Es vital saber conducir los clientes, demostrarles que nuestro trabajo es serio, profesional y que tiene fundamentos sólidos.

Los masajistas que ofrecen "shows de sexo en vivo", felaciones o penetración acaban por confundir al cliente. Es la base de la educación errónea que consiste en "premiar" al cliente con "extras" que acabarán desdibujando nuestra profesión y el concepto que de ella tiene la sociedad.

El masaje suele ser considerado un lujo al alcance de pocos cuando no una simple terapia contra el dolor muscular o articular. Visto como placentero, el masaje se ve como banal o insustancial.

Sexo y erotismo

El erotismo y el sexo se confunden fácilmente. Solo falta que nosotros mismos lo confundamos más y arrastremos el límite hacia territorios que no deberían llamarse sexo. Que una persona "compre" sexo cuando se le ofrece un masaje también es perjudicial para clientes, masajistas y escorts o chaperos.

Muchos de mis compañeros de profesión me comentan "esto no es lo que era, he bajado los precios a la mitad y aun así no viene nadie".

Son tiempos difíciles para todos, pero, como siempre, sobrevivirán los que sepan manejar mejor la intuición, la inteligencia y sus propios valores personales y profesionales. Una clientela leal y un boca a boca positivo no pueden hacer más que ayudar.

Somos nosotros, los masajistas, quienes tenemos en nuestras manos —y nunca mejor dicho— el futuro de nuestro trabajo.

Siendo responsables y consecuentes podemos crear una "identidad corporativa". Repitiendo e insistiendo en la serie de atributos que deseamos se asocien con nosotros.

Dinero fácil

El dinero fácil tiene los días contados. Como dice la sabiduría popular más antigua, "pan para hoy, hambre para mañana". Hacer cualquier cosa que pida un cliente ya ha acabado con profesiones como el periodismo, tan expuesto a los intereses comerciales de los anunciantes que el público ha acabado con desacreditar cualquier noticia percibiéndola como publicidad encubierta.

Las personas que me preguntan "y cómo llevas esto de ser masajista erótico, debe ser muy duro prostituirte" se llevan una sorpresa cuando les digo que ésta es mi vocación.

Además de que confunden el masaje con la prostitución. No es así. Es un trabajo delicado en el cual caminas sobre un hilo como un equilibrista, y he aquí su encanto.

Personas felices

A diario trato con personas felices, que saben elegir lo que les atrae, saben vivir según su propio estilo y reconocen sus deseos como legítimos, realizan sus aspiraciones y disfrutan de su presente.

Esta actitud positiva, alegre y optimista les nutre y les facilita el valorar su propio presente y su conciencia del bienestar. Valorar lo que somos, lo que tenemos y saber emplearlo en nuestro propio beneficio es algo más difícil de lo que parece, y cuando se logra equivale a poseer la llave de la felicidad.

Vivir rodeado de este tipo de personas también me nutre a mí. Me comunican su alegría, su agradecimiento, su visión positiva de la vida y del presente.

Esta energía a su vez revierte en los clientes venideros, a quienes siempre trato con simpatía, educación y empatía. Entiendo lo que desean y les ofrezco una experiencia que saben valorar y disfrutar.

Si tienes dudas

Si tienes preguntas no dudes en escribirme o en llamarme. Tendrás a tu alcance una información muy precisa y muy clara sobre mis servicios.

Un abrazo!
Paco


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